Precios de los principales commodities siguen con tendencia a la baja

La baja en los precios de los commodities agrícolas se vino fortaleciendo en los últimos meses llegando incluso en las últimas semanas a valores menores registrados en abril pasado. La buena cosecha brasileña y el avance de la producción estadounidense siguen presionando a la baja.

Según los últimos datos de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), el precio de la soja cerró la semana en USD 500,92 por toneladas, nivel 5,1 % inferior al registrado en los primeros días de la última semana de abril. No obstante, tras haber caído por debajo del nivel alcanzado esta última semana, las perspectivas de un menor stock mundial y el déficit de humedad actual en el medio oeste estadounidense permitieron una recuperación del precio para el contrato de julio.

En cuanto a los precios, los analistas nacionales e internacionales indicaron que la caída se debería en parte a la buena cosecha brasileña y al avance de la producción de Estados Unidos, además de una menor demanda y las ventas de los fondos de inversión.

Por otra parte, el precio del maíz cerró en USD 240,25 por toneladas, esto es USD 1,09 menos al de abril. El mercado se encuentra con escenarios mixtos, por un lado, continúa la preocupación por la sequía en el medio oeste de Estados Unidos; mientras que, por otro lado, existe menor demanda de maíz americano y buen avance de la cosecha del cereal brasileño, lo que finalmente podría traer estabilidad en los precios.

Por su parte, el precio del trigo cayó 3,7 % alcanzando USD 230 por tonelada, en medio de un mercado fluctuante a causa del conflicto ruso-ucraniano y la reducción de la exportación de dicha zona por una menor producción. Por su parte, la carne experimentó un incremento del 11,1 % respecto al año anterior, ubicándose en promedio en USD 3,621 por toneladas en marzo.

Según el informe del Banco Central del Paraguay (BCP) respecto a los precios, los temores a una desaceleración económica global, los recientes acontecimientos en el sector financiero internacional y la producción récord en Brasil han contrarrestado las presiones alcistas sobre la oleaginosa. LN